Fueron cinco disparos, dos le dieron a Lennon en la espalda y le hicieron girar, otros dos disparos llegaron al hombro, la última bala no logró alcanzarlo impactando en la parte interna del edificio. Finalmente las balas habían ocasionado siete orificios en su cuerpo, habían perforado los pulmones y atravesado el pecho. Tenía el hombro izquierdo destrozado y una bala rebotó de este hombro hacia el pecho, cortando la aorta y tráquea.
Un John herido logró abrir la mampara del edificio, alcanzó a subir unos cinco escalones donde finalmente cayó herido de muerte y junto con él las cintas de las sesiones que llevaba. Le brotaba sangre de su boca y pecho, podía pronunciar débilmente “Ayúdame… he sido disparado”.
Jay Hasting, vigilante nocturno del Dakota, activó la alarma que conectaba a la policía, trató dar asistencia a John y lo cubrió con su abrigo.
“John Lennon entró tambaleándose con una expresión espantosa y confusa. Yoko le seguía llorando y gritando «Han disparado a John!!!»”
- Jay Hasting -
Mientras tanto a las afueras el asesino se quedaba inmovilizado. El portero José Perdomo le increpaba “Sabes lo que has hecho?”, el asesino respondía “Sí… he disparado a John Lennon”. El asesino dejó caer el arma vacía y Perdomo la pateó alejándola.
10:50 pm
El agente de policía, Steven Spiro recibe una llamada por radio en su patrulla indicándole que habían disparos en 1 West 72nd Street en el edificio Dakota. Él y su compañero, Peter Cullen, se apresuran para llegar al lugar.
Otro patrullero de policía llegó al edificio, el asesino se despojó de su abrigo y gorra demostrando a los policías que no llevaba más armas. Sus ocupantes, los agentes Tony Palma y Herb Frauenberger avisaron a la central policial “Disparos en la West 72nd Street”.
Spiro y Cullen bajaron raudos de su patrulla y se acercaron al asesino que seguía inmóvil cerca a la garita de seguridad. Spiro sacó su revólver y le grito: “No te muevas! Manos sobre la pared!”, luego esposó al asesino y se protegió con él por si hubiese otro cómplice.
10:53 pm
Los policías llamaron a una ambulancia, pero esta tardaría siete minutos, Palma y Frauenberger decidieron trasladar a Lennon a la parte trasera de una tercera patrulla que acababa de llegar. Palma les dijo a los agentes de esta, William ‘Bill’ Gamble y James Moran: “Al hospital, rápido!!!”. Moran trataba de comunicarse con Lennon para que este no se desvaneciera: “Sabes quién eres?”, John asentía con su cabeza.
Camino al Hospital Roosevelt en la 59th Street, el agente Gamble se pasó varias luces rojas. John estaba llegando al hospital sin pulso e inconsciente en el asiento trasero.
11:00 pm
El Dr. Stephan Lynn, Director de Servicios de Urgencia del Hospital Roosevelt y un equipo de siete médicos en traumatismos trataban de salvar a Lennon recurriendo a masajes directos al corazón y transfusión de sangre.“No sabía exactamente lo que estaba pasando. A través de las puertas vi que dos agentes de policía entraron. Llevaban un cuerpo sobre sus hombros. Estaba sin vida. Pero estábamos listos… Posicionamos el cuerpo delante de nosotros en una camilla en la sala de reanimación. Estaba claro que había tres heridas de bala en la parte superior del pecho izquierdo y otra en el brazo izquierdo. También quedó claro que no había circulación, ni abundancia de sangre... Al principio no sabíamos que era John Lennon. Como parte de nuestra rutina normal obtuvimos su identificación de su ropa y decía: John Lennon, las enfermeras decían: «No se parece a John Lennon, no puede ser»… Fue absolutamente imposible reanimarlo.”
- Dr. Stephan Lynn -
11:10 pm
El Dr. Lynn y su equipo luchan para salvar la vida de John. Pero las balas han destruido todos los vasos sanguíneos que salen del corazón, de la aorta y de sus ramificaciones.
“Literalmente, sostuve el corazón de John Lennon en mi mano, lo masajeé para tratar de reanimarlo y realizamos transfusión de sangre. Pero estaba claro que con todos los vasos destruidos no habría absolutamente nada que pudiéramos hacer esa noche.”
- Dr. Stephan Lynn -
Mientras tanto, el agente Tony Palma trasladaba a Yoko al hospital. Ella se había comunicado con David Geffen quien llegó a los pocos minutos. El Dr. Lynn se acercó a Yoko y le dijo:
“Le dije «Tenemos muy malas noticias. Desgraciadamente y pese a todos los esfuerzos, su marido ha fallecido». Su primera respuesta fue inmediata: «No es cierto. Está mintiendo. No puede ser, no le creo...». Yoko Ono estaba muy conmocionada. Y de hecho lo fue cuando una de las enfermeras le entregó el anillo de bodas de John Lennon, en ese momento ella aceptó el hecho de que su marido había muerto.”
- Dr. Stephan Lynn -
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| Yoko Ono deja el Hospital Roosevelt, resguardada por el agente de policía Herb Frauenberger a su derecha y acompañada de David Geffen a su izquierda |
Posteriormente en una conferencia de prensa improvisada en el Hospital Roosevelt el Dr. Lynn dijo: “Lennon nunca tuvo oportunidad después del primer disparo. Sufrió heridas en sus hombros, pecho y espalda – siete en total, producidas por cinco balas.”
Esa misma noche en el Dakota miles de personas se reunían espontáneamente para hacer una vigilia, algunos lloraban, cantaban, tocaban música de Los Beatles, muchos fans llevaban y ponían flores en la entrada del edificio donde John había sido baleado.
Esa misma noche en el Dakota miles de personas se reunían espontáneamente para hacer una vigilia, algunos lloraban, cantaban, tocaban música de Los Beatles, muchos fans llevaban y ponían flores en la entrada del edificio donde John había sido baleado.
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Yoko decidió no realizar un funeral y el 10 diciembre el cuerpo de John fue cremado en el Cementerio Ferncliff de Hartsdale en Nueva York.
Cuatro días después, el domingo 14 diciembre a las 02:00 pm aproximadamente 100 mil personas se unieron en el Central Park, 20 mil en Liverpool, miles en el resto de Estados Unidos, España, Francia, Australia y Alemania, además de muchas estaciones de radio para guardar diez minutos de silencio en honor a la vida, a la música y recuerdo a John. El mensaje de Yoko ese día fue:
“John amaba y oraba por la raza humana. Por favor hagan lo mismo por él.”
– Yoko Ono –
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“Tenemos que dar la gracias a Dios o a lo que sea que este arriba, el hecho es que todos sobrevivimos. Todos sobrevivimos a Vietnam o Watergate o a la tremenda turbulencia que es el mundo… El mapa completo está cambiando y nos dirigimos a un futuro desconocido, pero aún todos estamos allí y mientras haya vida habrá esperanza.”
- John Lennon -
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¿SABÍAS QUE...?
- El comentarista deportivo Howard Cosell de la cadena ABC dio la noticia de la muerte de John durante una transmisión en vivo del partido de fútbol americano entre los Miami Dolphins y los New England Patriots, esto llegó a aturdir a miles de televidentes.
- En el 2003 la copia del 'Double Fantasy' autografiada por Lennon para su asesino se vendió por US$ 525,000, convirtiéndose en el disco más valioso jamás antes vendido.
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